Nacida en Sinaloa, México, Julieta siempre supo que quería servir a su comunidad. Es una educadora apasionada y líder comunitaria que se dedica a empoderar las vidas de los inmigrantes.

Julieta emigró a Los Ángeles, California en 1968. Al principio de su carrera, administró una agencia de viajes internacional que eventualmente la llevó a convertirse en directora de educación postsecundaria. En 1981, abrió una escuela vocacional que brindó a los trabajadores lesionados capacitación enfocada en su carrera.

Después de jubilarse ya través de su trabajo voluntario y de justicia social, Julieta notó que muchos inmigrantes latinos en el Valle de San Fernando no tenían las habilidades necesarias para leer y escribir. Esto la animó a enseñar, y después de un año de trabajar con un pequeño grupo de estudiantes adultos, obtuvo el apoyo del Consulado de México y el INEA (Instituto Nacional de Educación para Adultos) y otros socios de la comunidad. Julieta financió la plaza comunitaria en 2015 con la misión de brindar acceso equitativo a la educación básica y llenar la brecha educativa entre los inmigrantes.

Ese mismo año, Julieta fue nominada como Mujer y Empresaria del año. Se informa que es la primera mujer hispana/latina en ser aprobada para un préstamo comercial por parte de la Administración de Pequeñas Empresas. Julieta también es consejera certificada en salud mental, terapia familiar, defensa de la violencia doméstica y dependencia química.